Conoce el control crucero y haz más cómodos tus viajes
Pasar horas al volante puede ser agotador. El pie se cansa, la atención baja y cada kilómetro se siente más largo que el anterior. Por eso existe el control crucero: una herramienta que te permite fijar la velocidad del auto y mantenerla sin tener que presionar el acelerador.
Esta función hace que los viajes extensos sean más cómodos y ayuda a evitar la fatiga. Si a eso le sumas la versión adaptativa, el auto incluso ajusta la velocidad según el tráfico que tienes al frente. Tú solo te enfocas en conducir; el resto lo hace el sistema.
¿Qué es y cómo funciona el control crucero de un auto?
Es una función que permite mantener una velocidad estable sin pisar el acelerador. Tú decides a cuántos kilómetros por hora quieres avanzar, activas el sistema, y el auto mantiene ese ritmo hasta que lo detengas con el freno, el embrague o manualmente.
¿Para qué sirve? Te ayuda a descansar el pie derecho, mantener una velocidad constante en carretera, ahorrar combustible en trayectos largos y reducir el desgaste físico que genera conducir durante horas.
A esto se suma un mayor enfoque en el entorno porque no estás pendiente de acelerar o regular la marcha a cada momento.
¿Cómo usar el control de velocidad crucero?
El sistema es fácil de usar:
- Enciende el control con el botón o comando correspondiente.
- Acelera hasta la velocidad deseada.
- Presiona “Set” para fijarla.
- Ajusta con los botones “+” o “–” si quieres subir o bajar la velocidad.
- Si frenas o cambias de marcha, se desactiva automáticamente.
Comodidad sin perder atención
Hay algo más avanzado y útil todavía: el control crucero adaptativo. Esta versión va un paso más allá porque detecta la distancia con el vehículo de adelante.
Si el tráfico se frena o se pone más lento, el sistema reduce automáticamente la velocidad y la recupera cuando el camino vuelve a estar libre.
No tienes que hacer nada. El auto se adapta al entorno por ti. Esta tecnología usa sensores, cámaras o radares para leer lo que ocurre en la ruta y actuar en consecuencia. Así, tu nivel de atención se mantiene estable y el viaje se siente más fluido después de varias horas al volante.
¿Cómo lo integra Lynk & Co?
En Lynk & Co incorporamos esta herramienta con un enfoque claro: reducir el cansancio en viajes largos y mejorar la experiencia de conducción.
Esta función está disponible en nuestros modelos Lynk & Co 06 y Lynk & Co 09, y se activa directamente desde el volante, con comandos intuitivos que dejan fijar y ajustar la velocidad sin sacar las manos.
Además, nuestros vehículos cuentan con control adaptativo, que utiliza sensores frontales para detectar la distancia con el auto de adelante.
El sistema regula la velocidad automáticamente, desacelera si es necesario y vuelve al ritmo establecido cuando la vía está despejada.
Para conocer cómo funciona en la práctica, solo hay que agendar un test drive en cualquiera de nuestros concesionarios Lynk & Co. Manejarlo es la mejor forma de entender cómo cambia la experiencia en carretera.